CAPÍTULO 11-MELANIE- Nada…
Noto como mi cuerpo va quedándose sin vida. Mis músculos se
quedan sin fuerza, mis parpados se niegan a levantarse… No respiro, y eso me
mata. Todo pasa en un segundo. Sólo eso, un segundo. En un segundo mi vida se
acaba. Mis pensamientos se van oscureciendo hasta llegar a la nada. Nada. Soy
nada. Me estoy muriendo, lo sé. No me muevo. La inconsciencia va invadiendo mi
cuerpo desde los pies, y poco tardará en embargarme por completo. Sí, me estoy
quedando sin nada. Ya no soy nada. Nada…
Aire. Fresco. Caliente. No consigo distinguirlo. Pero aire.
Es aire… ¿De dónde ha salido? Sólo existe eso y no entiendo nada. En una nada
tan absoluta como en la que estoy, solo hay aire. Aire que viene y se va con la
misma rapidez que los latidos de un corazón exaltado. Estoy desconcertada, no
tengo suficientes fuerzas como para dar con una respuesta a ese aire que ha
aparecido de repente. Pero mi muerte no continúa. Se detiene, y me encuentro en
ese punto intermedio. No veo nada, pero nada ha acabado todavía. Esos soplos de
aire me van devolviendo la vida. ¿Qué es lo que me lo proporciona? Cada vez esa
vida que estaba perdiendo va volviendo a mí. Mi corazón empieza a latir. Late
débilmente, pero late, algo que antes, durante unos instantes, había dejado de
hacer. Y un terrible golpe en pecho hace que abra los ojos y que,
definitivamente, mi corazón lata con normalidad.
Ahora que respiro por mí misma, ahora que mi corazón ha
empezado a latir de nuevo, ahora que mi cabeza bombea produciéndome un dolor
intenso, no sé bien lo que ha pasado… No logro recordar del todo como era esa
sensación de estar al borde de la muerte… Me agarro la cabeza con fuerza con
una mano, pero no me tapo los ojos ni los cierro. Observo atentamente todo lo
que me rodea. Los edificios de mi alrededor, el portar que tiene la puerta
abierta… Lo recuerdo todo. Todo lo que pasó antes de caer en ese abismo está
grabado a fuego en mi mente. Pero no concuerda nada. Nada tiene sentido. No
tiene sentido que sea Axel la persona que me mira tan de cerca, la que llora y
se apoya en mi hombros ahora mismo… No tiene sentido que haya sido su aire el que
me haya hecho regresar a la vida cuando ha sido su mano la que ha hecho irme
hace unos segundos… No tiene sentido que vea la cara de Alex por encima del
hombre de Axel, allí, mirándonos sin expresión alguna. No tiene sentido que no
esté aquí conmigo. Tendría que haber sido él el que me hubiese salvado si ha
estado viendo lo que ocurría todo el tiempo. ¿Se han invertido los papeles?
Mucha suerte en tu proyecto, te deseo lo mejor.
ResponEliminaUn saludo.
Muchas gracias, de verdad^^
Elimina¿Eh...? No entiendo nada...
ResponElimina